ui.. ai..

Me duele todo. El brazo, la nalga, el dedo gordo del pie derecho, el cuello, hasta ese músculo que tenemos justo entre la axila y el pecho, sí, ese músculo que cuando lo contraes parece que tus pechos bailen al son de la música que estás escuchando. A veces lo contraigo sin darme cuenta y la gente se me queda mirando con una cara realmente graciosa, seguro que piensan que lo estoy haciendo para llamarles la atención, pero yo siempre lo he considerado como un tik de lo más normal, como cuando alguien mueve la ceja hacia arriba. Aunque hoy la palabra mover no figure en mi diccionario de bolsillo, espero que mañana todo haya vuelto a su sitio. Deberíais haber visto la cara que llevaba ayer en el gimnasio justo 5 minutos después de empezar a jugar a baloncesto con un grupo de cuarentones... creo que cuando me metí en la cama, los poros de mi piel aún seguían emitiendo rayos rojos... creo que todo el gimnasio se sorprendió al ver lo sensible que puedo llegar a ser al deporte...

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